Yo en tu lugar tu en el mio

Gente por redes sociales con miles de seguidores.  Gente que sucumbe ante discursos triviales cada día.  Gente dispuesta a aceptar cualquier cosa que venga de sus "adorados ídolos". Gente que por gustarle un determinado contenido aceptan cualquier otro con la escusa de que sea de esa misma persona, cegados por el más puro fanatismo. El siglo 21 ha traído cosas buenas y malas, por supuesto, pero lo que sí es cierto es que el nivel de adeptos fanáticos a lo que sea, hoy en día está más presente que nunca.  Ya no es imprescindible una religión que nos dicte como y de qué manera vivir, que es lo bueno y qué es lo malo.  Hoy en día son más que nunca todos aquellos puntos de poder dispersos en nuestro mundo y escondidos de alguna manera en nuestra sociedad (una gran multinacional, el Influencer de turno, o sencillamente quien tenga una capacidad de convicción y divulgación mayor que la tuya). El conocido y a su vez desconocido "marketing", esa herramienta la cual nos ense

Las redes sociales llevan más de una década entre nosotros y no paran de cobrar importancia en movimientos de personas y empresas, las cuales usan para una nueva forma de comunicarse y comunicar. Es curioso como algo tan aparentemente sencillo triunfa de esta manera y es tan bien acogido por todos... El asunto es que quizás no nos estamos dando cuenta de lo que conlleva aceptar de manera tan rotunda un cambio en la comunicación tan grande como es este. Creo que nos hemos puesto tantos obstáculos nosotros mismos a la hora de comunicarnos entre nosotros que necesitamos de algo artificial que nos eche una mano en ese ámbito. No somos capaces de comunicarnos con la gente que camina por la calle ni la que va en el metro y nos cuesta entablar conversaciones y abrirnos con gente sin venir a cuento, ya que nos han enseñado a eso... "no hables con extraños, nos dicen siempre" lo llevamos escuchando desde que llegamos a la vida. Con la globalización y el crecimiento de las